Este cuento ha sido inventado por nuestra compañera Eva Montijano.
Erase una vez un niño que estaba sentado en la silla estudiando y estudiando.
Tocó la sirena del recreo y el niño no se movia para nada.
Y la seño le dijo al niño ¡ya a sonado la sirena del recreo y dijo el niño
¡Seño tengo, que estudiar para ser muy muy listo!.
Sono la sirena de las 2 y el niño levanto la silla y la puso encima de la mesa y dijo a la clase
¡adios que paseis un buen día!
Y le dijo a la seño ¡Adios seño! Y dijo la seño ¡Adios Guapo!.
FIN